Larry Carr, agente especial del FBI, agencia federal de los EEUU, decidió reabrir el caso de un robo de película, ocurrido en territorio estadounidense en 1971. Para lo cual, se ha desclasificado los archivos del caso y se procedió a divulgar el identikit de prófugo más misterioso de la historia norteamericana.
En plena vísperas de acción de gracias, un solo hombre secuestró un avión y en pleno vuelo se tiró en paracaídas, llevándose 200.000 dólares que había logrado obtener como rescate de la mano de los pasajeros.
El hecho ocurrió en noviembre de 1971, cuando un hombre arribó un vuelo que partía de Portlan en el estado de Óregon con destino en la ciudad de Seattle, Washintong y valido de un documento y pasaporte a nombre de Dan Cooper.
Cooper amenazó a la tripulación, diciendo que llevaba consigo y dentro de su maletín, una bomba que haría estallar en vuelo sino conseguía lo que pretendía: cobrar un rescate por el secuestro del avión y los pasajeros. Para ello, estaba unido de una serie de cables que llevaba debajo del traje y los cuales iban conectados a su portafolios, dentro del cual, según la declaración de una azafata, llevaba algo similar a tubos de dinamita.
El misterioso personaje, que vestía traje oscuro, camisa blanca y corbata, escribió una nota para los comandantes de la aeronave y tras ello, aterrizó en Sattle, donde el secuestrador liberó a 36 rehenes y reclamó cuatro paracaídas. Al despegar el avión, éste tomó un nuevo rumbo: México. Pero el hombre desapareció en pleno vuelo y entre las ciudades de Sattle y Reno, tras lo que nunca más se tuvo noticias de él.
Sin dudas, un atraco espectacular digno de ser representado en el cine.
El misterioso personaje, que vestía traje oscuro, camisa blanca y corbata, escribió una nota para los comandantes de la aeronave y tras ello, aterrizó en Sattle, donde el secuestrador liberó a 36 rehenes y reclamó cuatro paracaídas. Al despegar el avión, éste tomó un nuevo rumbo: México. Pero el hombre desapareció en pleno vuelo y entre las ciudades de Sattle y Reno, tras lo que nunca más se tuvo noticias de él.
Sin dudas, un atraco espectacular digno de ser representado en el cine.
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